AeroTucanes RC Barranquilla

Es un pájaro... es un avión... No,  es un Aeromodelo.

 

En las pistas  de aeromodelos en varias ciudades de Colombia  encontramos a los entusiastas del aeromodelismo volando alto con los pies en el suelo.

 

En algún punto de   la vía de Cerete a San Carlos (Córdoba) al margen derecho, o en la vía de Corozal a Betulia {Sucre), o Cerca de la intersección Ciénaga-Santa Marta (Magdalena) o cerca de la vía  Barranquilla a Sabanilla  o en el Aeródromo de San Pedro de Uruba (Antioquia), es muy posible que en los fines de semana  vea un destello de luz solar en una fracción de segundo en lo alto del cielo. Un aeromodelo. Volando hacia arriba hasta que se detiene, y luego girando en espiral hacia abajo cuando la luz del sol se refleja en el  fuselaje o las alas, puede esperar que se estrellara contra la pista.

Tal vez se adelante  a la escena, esperando ver un  desastre. Lo que encuentras  es un pequeño grupo de aeromodelistas  felices haciendo maniobras acrobáticas con sus aviones piloteados  por control remoto mientras un pequeño grupo de espectadores los observa.

 

Con una envergadura (Longitud de Ala) de hasta   2 metros y más, los aeromodelos son difíciles de distinguir de un avión de tamaño real  cuando están en el aire.

 

Los pilotos de los aeromodelos son miembros de varios clubes (RC Montería, RC Corozal, Aero Tucanes de Barranquilla y Club la Y de Santa Marta).

Que utilizan estas pistas.

En ellas, los pilotos vuelan sus modelos de aviones, drones y helicópteros a control remoto.

Solo unos pocos de estos pilotos se han sentado al mando de un avión de tamaño real.

 

Los pilotos con más de 25 años en el hobby recuerdan y algunos todavía vuelan lo que se conoce como aeromodelos de control de línea, los cuales están controlados  por dos cuerdas o  líneas de vuelo de 20 metros  hechas de alambre de acero trenzado y sostenido por el piloto parado en medio de un gran círculo. Con las líneas de vuelo se controla la altitud del modelo.

 

La mayoría de los pilotos  tienen  varios modelos.

 

En la pista de San Carlos con frecuencia nos encontramos a Don Jesús Giraldo de 77 años, quien viene desde Tolú a volar sus aeromodelos en compañía de su esposa doña Esperanza,  quien es su copiloto.  Normalmente don Jesús trae dos aviones un bimotor eléctrico y un Ala alta acrobático. Jesús al igual que los otros pilotos  lleva su avión controlado por radio a través de una serie de maniobras acrobáticas. Los  pilotos controlan sus aviones sosteniendo un transmisor de radio portátil que se comunica de con un receptor dentro del avión, Así se controla todos los aspectos del vuelo tal cual como si un piloto estuviera sentado en la cabina del avión.

 

También tenemos a Mauricio Gaviria (más de 20 años en el Hobby) de Montería, vuela un modelo a escala de un Biplano real conocido como el  “Ultímate”. Con una envergadura de 1.8 mts lo suficientemente grande como para engañar a los conductores de la carretera de Corozal a San Carlos, que pueden pensar que es un avión de tamaño real  cuando está volando, este modelo al igual que el full escala están diseñados para realizar las maniobras acrobáticas más exigentes.

Sosteniendo el control remoto y parado a un lado de la pista, Mauricio Gaviria pilotea su avión de gasolina (algunos funcionan con baterías) hacia arriba 100 metros  y antes que se detenga en el aire  le  hace varios rollos o giros verticales g. Luego, el Ultímate gira hacia abajo, acercándose a unos pocos metros de la pista  antes de que Mauricio  lo guíe de regreso al cielo y a través de varias maniobras de Loop o bucle, como si el avión estuviera en una montaña rusa extrema.

 

“Se necesita mucha concentración para volar el avión”, dice el Capitán Gaviria, y agrega que una alarma suena en su transmisor cuando solo quedan dos minutos de combustible. "En ese momento, después de unos 10 minutos, estoy listo para descansar”. Dice sonriendo.

 

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Anécdotas de los capitanes y sus aeromodelos.

 

Miguel, Rafael,  Ruiz, Reynaldo, Cesar, José, Sixto, Ivan, William, Raúl,

Fuminalla, Paniza, Jaime, Jorge, Rene, Pipi, Marco, Richard y otros...

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Algunos de los  aeromodelos a control remoto se estrellan, ya sea por una falla técnica (Mal contacto de la batería, Pérdida de Señal, desprendida del Ala)  o cuando un piloto pierde el contacto visual con el avión. Si no pueden verlo, no pueden volarlo y el suelo se interpondrá en su camino. Cuando un avión no se puede reparar, la sección de la cola puede terminar exhibida en el "Muro de la Vergüenza" no oficial en el refugio adyacente al campo de control remoto. Tal como lo hacen en la pista Aerotucanes de Barranquilla.

 

La mayoría de los aviones de radiocontrol que se vuelan en estas pistas son bastante grandes que normalmente se les pueden quitar las alas para que puedan ser transportados en sus automóviles o camionetas.  Cuando viven cerca de la pista en su moto como lo hace el piloto José Banquet de Cerete con su Aeromodelo “Amparito" un avión  trainer de hace años,  que dicen que fue del papa de la diva colombiana Amparo Grisales.

 

Algunos tipos tienen aviones que son tan grandes como el Capitan Carlos Vengoechea, que necesitan un remolque para transportarlos", comenta el Doctor Cesar Aeromodelista de Cerete.

 

Poco después, se escucha la potente  y animada voz de Rafael Ruiz, piloto y entusiasta del Aeromodelismo, sin ayuda de  megáfono, anunciando el lanzamiento de un paracaídas desde un Aeromodelo acondicionado para esto piloteado por el “Capitan" Richard.

El cielo está despejado.

Cinco, cuatro, tres, dos, uno... y lanzamiento”, en el Transmisor de Radio se escucha “Soltar Paracaídas” en el momento que Richard conmuta un Switch de su Radio.

El paracaídas cae del avión y a pocos segundos se abre y desciende muy suavemente sobre la pista mientras el avión hace algunas maniobras cerca del paracaídas en momentos parece que el avión lo va a coger en el aire. Finalmente en una carrera y precisión de felino, el piloto Sixto toma el paracaídas antes que caiga al suelo. Ambos piloto y Sixto reciben ovación y aplausos de los espectadores y  pilotos.

 

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A San Pedro de Urabá,

 

Un pueblo de acceso difícil por carretera o mejor dicho por trochas. Varios aeromodelistas de Apartado como Raúl Herrera y el Doctor Fuminalla  y de Montería como Richard Ehemann, Ivan y Sixto Betancour llegan al aeródromo luego de casi tres horas de viaje, para volar en la pista larga y pavimentada sus aviones y helicópteros de gran tamaño  y mucha velocidad como son los Jets de turbina que funcionan y suenan igual que las escuchamos en los jets de pasajeros o de combate.

Raúl comenta que los helicópteros pueden ser tan pequeños que pueden caber en la palma de una mano. Richard interrumpe para recordar cuando Ivan perdió uno de estos en la pista de San Carlos; el cual fue encontrado meses después por Hugo y Juan nuestros ayudantes en San Carlos.  Raúl continúa con el tema de los helicópteros comenta que  hay modelos más grandes con tramos de rotor hasta de 2 metros o más.

Richard quien  ha estado en el hobby desde que tenía 15 años, dice que debido a que los helicópteros pueden ir en cualquier dirección, son los más difíciles de volar. Es como equilibrar un palo de escoba en un dedo de la mano.

 

Raúl. luego vuela un heli grande, un Trex 700 Eléctrico. Sorprende a todos cuando conmuta un Switch en el Transmisor y coloca el radio en el suelo.

El helicóptero se queda inmóvil cual dron.

 

A varios nos gusta el vuelo en escala del Heli. Pero tenemos al Capitan Giovani Calle que con frecuencia nos visita desde Medellin,  todo un experto en vuelo acrobático  y 3D. Cuando Giovani pilotea sus helicópteros y drones parecen y suenan como un enjambre de abejas enojadas.

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En un hermoso campo

 

se encuentra la pista Betulia, lleva este nombre por el pueblo que está cerca a pocos kilómetros de Corozal.

En esta pista encontramos a los  capitanes  Jorge Paniza y Jaime Espinosa. Richard recuerda cómo  conoció a Paniza, hace  ocho años. “Jorge y un amigo estaban volando un  aeromodelo en una carretera en construcción, la actual doble calzada Sincelejo a Corozal. Al verlos y sin conocerlos giraron en “U” la camioneta en la cual en la también venían Rafael y Reynaldo Palacios. Todos aeromodelistas,  acababan de comentar que esa carretera estaba buena para una pista. Se presentaron, competieron un rato y nació una amistad que ya lleva años.”

 

Pronto Jaime lanza un ala voladora gigante de dos metros de Envergadura y motor eléctrico. Hace varias maniobras y vuelos rasantes. Luego la “Opterra" que recuerda al bombardero sigiloso B-2,  se posa suavemente sobre el prado.

Luego de una breve pausa bebiendo unas cervezas, Jorge se dirige a su tráiler diseñado por el mismo, que además de transportar los aeromodelos, le sirve de mesa de trabajo, mesa de comer y proporciona sombra para cubrirse del caluroso sol mediante una sombrilla de playa multicolor y

saca el fuselaje y las  alas de un “Yellow Big Ugly Stick" muy lindo.

Lo arma rápidamente y en colaboración con Jaime lo preparan para encender el motor. Jorge despega y vuela sin problemas durante ocho minutos. Luego aterriza sobre el camino de la finca que se utiliza como pista.

De almuerzo los famosos tamales /pasteles de Olga Piña.

 

Luego Richard y su copiloto Hugo, preparan y vuelan los aviones tipo trainer que llevaron,  el Doctor Blue y la Amenaza Naranja.

Desde el Dr. Blue en uno de los vuelos se lanza un paracaídas. El cual por efecto del viento cae un poco lejos. Pero es recuperado por Hugo.

Posteriormente, el joven capitán Luis Zuluaga y nuevo aeromodelista, intenta hacer volar una mini Piper Cub de motor eléctrico. Pero el pequeño avión amarillo se niega a despegar a pesar de varios intentos de Luis. En una oportunidad si estuvo en el aire por breves segundos cuando Paniza lo lanzó con la mano, pero al suelo retorno. El golpe desprendió el motor. Ese día terminaron los intentos de hacer volar la Piper. Luis comenta que para por ahora vuela mejor y más confianza un avión real desde los mandos de la Cabina.

Pasaron  un día muy agradable. Hora de regresar a Montería, Dos horas de viaje.

A los días, Richard recibe por email una foto…foto multa por exceso de velocidad.

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Hace unos meses Richard

 

recibe una invitación para un encuentro de aeromodelistas en Santa Marta en la pista la “Y" (La intersección entre Ciénaga, Santa Marta y Fundación).

El encuentro está organizado por Carlos Fernández (El Capitán Pipi) y Marco Cubillos, los más apasionados del hobby en Santa Marta. También respondieron a la convocatoria los Aeromodelistas de Barranquilla, los cuales llevarán aeromodelos gigantes de motor a gasolina y varios jets de turbina.

Hay que participar les cometa Richard a varios de sus amigos en Montería, Apartado y Corozal. Pero como es un viaje largo y el evento puede durar dos días, es necesario disponer de  al menos cinco días.

Por lo tanto viaja solo en compañía de su Piper Cub J3 de 2.2 metros de Envergadura.

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Luego de casi 7 horas llega a Santa Marta. El evento es al siguiente día, temprano en la mañana se  comunica con Marco y Pipi. Se encontrarán en la pista.

 

Pipi y Marco llegan con sus Piper Cub Gigantes.

 

Luego llega Gabriel el encargado de la finca donde está la pista. A quien se le ha encargado el sancocho trifásico, cervezas, gaseosa y agua para al menos 20 personas. Pues muchos pilotos vendrán acompañados de sus esposas, novias o hijos. Gabriel  comenta que todo va muy bien. Y ayuda a colocar algunas carpas con Pipi.

Mientras Marco y Richard inspeccionan las bermas de la pista que fueron podas en días anteriores.

Esta pista, pavimentada fue construida en los años 80 para avionetas de fumigación, es muy larga más de mil metros. Los aeromodelos solo requieren doscientos  o trescientos metros. Todo está adecuado para el evento.

 

Al poco rato llegan los Aeromodelistas de Barranquilla, son como seis vehículos, algunos con remolques decorados con motivos del hobby.

 

Pipi y Marco  los saludan y relacionan  con Richard, los pilotos son:

Jorge Díaz Granados (Piper Cub), Gustavo (Jet Turbina), Carlos Herrera (Extra 300), Luis Gabriel (PT-19), Rene  Campos (Jets de Turbina), Jeyson (jet), Fuad (Ugly Stick), Dr. Jarib (jet Turbina), Cap. Jaime Colón (QEPD) (Twin Otter), Yuri, Teófilo y Álvaro Esmeral y su hijo Daniel que son el presidente y vicepresidente y únicos miembros del club RC Sahagún.

 

Los vuelos inician, se ven hasta tres aviones al mismo tiempo.

Son tres Piper Cub amarillas que contrastan con el cielo azul.

Jorge con  su Piper realizan maniobras de aterrizaje que llaman la atención de los espectadores.

 

Luego todos los pilotos hacen sus vuelos.

 

Los vuelos de los jets de Turbina son increíbles.

Jeyson realiza con su jet Viper su  primer vuelo, excelente demostración de sus habilidades. Aterrizaje perfecto. Recarga combustible y a los pocos minutos despega nuevamente. Y realiza algunas acrobacias, vemos que el Jet ahora se dirige en picada hacia el suelo, algunos pensamos que era una maniobra extrema y esperábamos ver al jet de regreso al cielo. Pero el Jet terminó estrellándose contra el suelo. Jeyson comenta que el avión no obediencia a sus comandos. La causa más probable según el piloto fue una interferencia o pérdida de señal.

Jeyson y otros amigos van en búsqueda del Jet siniestrado. Nadie vuela durante la búsqueda.

A los minutos llegan con los restos. En esta

Oportunidad ni la cola se salva para que pueda ser exhibida en el muro de la Vergüenza.

 

Luego se reactivan los vuelos y despega otro Jet al mando del Dr. Jarib. Despegue perfecto, Vuelo y Maniobras excelentes, hace la aproximación para aterrizar, todo va muy bien, faltan menos de medio metro para que toque la pista, pero de repente se desploma y cae sobre la pista uno de los trenes de aterrizaje se rompe y el jet se desliza sin mayores daños. Al parecer se redujo antes de tiempo la potencia de la turbina. No pasó a mayores.

 

Luego el  almuerzo, delicioso sancocho echo en leña.

 

Vemos al piloto Rene desarmando sus Jets. Fueron los únicos que regresaron intactos a Barranquilla. No Volaron.

 

Rene entonces vuela sus otros aviones con bastante destreza.

 

Ya llega la tarde y los pilotos comienzan a desarmar y guardar sus aviones. Para regresar a Barranquilla.

 

Excelente día de Aeromodelos.

En algunas oportunidades se organizan diferentes clases de  campeonatos como los de Escala, donde se premia a los mejores Aeromodelos que sean la réplica perfecta de uno real, tanto estéticamente como en vuelo. De Acrobacias, donde los pilotos deben realizar una serie de maniobras en un determinado tiempo y en una secuencia preestablecida. Richard menciona alguna de las maniobras el

Loop/Rizo Interior y exterior, Rollos o Toneles, Vuelta immelman,  ochos, ocho cubano, vuelo invertido, Caída de Ala,  Humpty  Bump, Snap Roll, barreras y muchas más.  Dice que en otra charla las explica con detalle.

 

Algunos fines de semana se realizan los “Fun Fly" competencia menos seria y divertida donde se hacen acrobacias y otras actividades como el corte de cola donde a un aeromodelo se le pone unos tres metros de cola, despega y los otros aeromodelos salen después a tratar de cortar la cola, gana el piloto que la corte o el avión que llevo la cola y no lograron cortarla. Es un show muy vistoso pues normalmente participan más de cinco aviones.

Richard comenta que realmente gana quien logre aterrizar su avión. Pues casi siempre hay choques en el aire. Curiosamente es algo que les encanta a los espectadores.

 

Otro concurso se denomina “El Limbo", donde deben pasar los aeromodelos por debajo de una cuerda o limbo. Inicia a una altura de tres metros, los que pasen continúan, cada vez se baja más el limbo. Igualmente suceden accidentes, los aviones se estrellan contra el piso, la cuerda o los postes del limbo.

Por eso los pilotos en estos concursos participan con aviones de poco costo.

 

Los aeromodelos se pueden  comprar como kits completos, kits parcialmente ensamblados (ARF). O  ya listos para volar (RTF). Los modelos también se pueden construir desde cero con láminas de madera de balsa y triplex o con láminas de espuma o cartón plástico.

Richard comenta que en Montería los hacen muy bien el Turco Dager y el Doctor Cesar, que incluso han construido maquinas “CNC" que cortan los moldes en base a los planos digitalizados en la computadora. En Santa Marta está el capitán Fernández. Excelente constructor y reparador, “el resucitador de aviones".

 

También menciona a Mincho en Cali/Buenaventura experto en configuración de helicópteros y aviones a escala. Además es quien se  encarga de la logística de los diferentes  campeonatos y eventos nacionales.

De inmediato menciona a Fredy Giraldo y  Gonzalo Sandoval de Medellin como los pioneros de los Jets en Colombia.

 

Muchos de los aeromodelos son réplicas de aviones reales, otros diseñados especialmente para acrobacias.

 

El costo puede variar desde  1.5 millones de pesos incluyendo el motor y el  radio control hasta más de 10 millones de pesos  los jets con turbina estos sin el sistema de radio control. El cual cuesta unos 4 millones o más.

 

En todos los clubes tienen aviones de entrenamiento y están felices de enseñar a cualquier persona interesada con la esperanza de que tengan una idea de lo que es este hobby y se conviertan en miembros activos durante toda su vida.

 

 Richard comenta que la mayoría de los entusiastas del aeromodelismo han estado volando desde su adolescencia, si no antes, y estamos realmente interesados en conseguir más miembros en todo nuestros clubes.

 

Los espectadores de todas las edades son bienvenidos en cualquier momento. Y los pilotos siempre gustosamente responden a sus preguntas tales como:

Y vuelan, a que altura y distancia pueden llegar, cuanto tiempo dura el vuelo, que tipo de combustible usan, ustedes mismos lo hacen o donde los compran, etc.

 

 

Mientras que algunos pilotos vuelan durante la semana, la mayoría vuela los fines de semana por la mañana.

Los pilotos normalmente contribuyen con una cuota para pagar el alquiler y mantenimiento de las pista.

 

Richard comenta que la satisfacción que este hobby  proporciona este es increíble.

Es muy gratificante construir el avión, configurar el Radio,  volarlo y regresar a casa con él en una sola pieza

 

También afirma que es una gran experiencia de aprendizaje. Aprendes de electricidad, soldadura, mecánica, programación y en el campo de vuelo muchos son verdaderos MacGyver, solucionando problemas que ocurren en último momento para que su avión o el de otro piloto puedan volar nuevamente ese día.